lunes, 7 de enero de 2008

UN PASEO HASTA EL TAJO DE LA CAINA

La Sierra de la Nieves

Hoy os quiero llevar de paseo a un lugar muy bonito, agradable de pasear, original y con un punto de espectacularidad. Yo he estado un par de veces y siempre me han quedado ganas de volver.

La dificultad es mediana, pero se puede adaptar a las posibilidades del paseante, porque como la ida es relativamente cómoda, hasta el Tajo, el que no quiera aventuras puede volverse por el mismo sitio y si quiere más dureza puede volver bajando el valle, como indica el relato.


Tengo que decir que me han acompañado, personas de mi edad, no muy acostumbradas a paseos por el monte y fueron capaces de llegar hasta el final; cansados, eso si, pero orgullosos de haberlo hecho y felices por lo que vieron.

En total el recorrido propuesto tiene unos 7 Kms

Apuntes históricos de la zona

El Parque Natural de la Sierra de las Nieves ocupa una superficie de poco más de 16.000 hectáreas.
Constituye una de las zonas más interesantes de la Serranía de Ronda sobre todo por los bosques de pinsapos que resultan sorprendentes en estas latitudes (téngase en cuenta que los abetales más próximos se encuentran en los Pirineos).


El nombre de la sierra hace referencia según algunos a la industria de conservación de la nieve que al parecer funcionó hasta 1931. Se hacían unos “pozos de nieve” donde se almacenaba ésta después de las nevadas de primavera, se apisonaba y tapaba con matorrales y tierra para bajarla hasta Málaga y otros lugares en el verano. El transporte se hacía de noche y a lomos de mulo, envolviendo la nieve en paja fina que servía de aislante.
Sin embargo es probable que sea más propio llamarla “de las Nieves” (y no “de la Nieve”) pues es de las pocas que permanecen nevadas varios días al año y este panorama es visible desde muchos lugares de la provincia.
Las precipitaciones que recibe la sierra, alrededor de1.000 litros por metro cuadrado al año, se filtra entre las calizas y dan lugar a surgencias de agua que originan ríos como el Turón (al Norte) que después de pasar por El Burgo forma el embalse del Conde de Guadalhorce, antes de desembocar en el río del mismo nombre. Al Sur el río Grande tras pasar por Tolox desemboca igualmente en el Guadalhorce. También al Sur de la Sierra nace el río Verde que origina el embalse de la Concepción cerca de Istán.

El nombre del itinerario lo da un profundo tajo que es el límite entre Tolox y Yunquera. Según la leyenda, una señora de nombre Caína y escandaloso comportamiento fue condenada por la Inquisición a ser quemada. Sin embargo, después de un largo proceso se decidió que una mujer cuyo nombre era el femenino de Caín, primer asesino bíblico, no podía ser ajusticiada de forma vulgar. El alto clero propuso que fuera despeñada por un tajo para escarmiento y enseñanza de los habitantes de Tolox y Yunquera.
Por eso el límite municipal de ambos pueblos se conoce como Tajo de la Caína.

Cómo llegar

Se sale para, desde Málaga, hacia Yunquera por la Autovía de Campanillas. A la altura de Cártama se toma dirección Coin, por la A-355. Pasado Coín se sigue por la N-366 hacia Alozaina y desde aquí a Yunquera. No es necesario entrar en el pueblo. Siguiendo por la misma carretera, dirección El Burgo y pasada la Torre Vigía, en el Km. 34,5 encontramos a nuestra izquierda una torreta de piedra que pone “Camino forestal a la Sierra de las Nieves” y al lado el cartel de la AMA (Cuidado porque no está muy claro en esta dirección, ya que el cartel se lee bien si vienes del Burgo, pero no al revés). Como referencia podemos tomar una gasolinera que hay más o menos a esa altura.


Tomamos por este carril, pasamos por la “Cañada del tío Felipe” y el campo de fútbol y seguimos primero en pendiente suave que va aumentando. A unos 4 kms, encontramos el puesto de control y una portilla que después de una curva nos deja en una bifurcación. Tomamos el carril de la izquierda y a unos 2 kms, llegamos al punto de partida del paseo, donde podemos dejar los coches. El carril de tierra se hace largo por lo que recomiendo paciencia.

Este punto, donde termina el carril, es el Mirador de Luis Ceballos y no tiene pérdida. Antes habremos pasado entre los primeros pinsapos.

En total el carril tiene unos 6 kms.











Comenzamos la marcha por el camino que a la derecha comienza junto a un gran enebro, en dirección Noroeste, por la ladera de solana (que mira al Sur) (incluyo foto aclaratoria, donde se ve el panel que hay al empezar), que está poblada de enebro, romero, jara, gamones, matagallo, esparto y algunas encinas y pinos de Alepo.



Después de 500 m. de bajada, suave, llegamos a un arroyo y comienza una subida de unos 200 m. y bajada de otros 200 hasta el siguiente arroyo. A partir de aquí subimos por una ladera de umbría (que mira al Norte) poblada por un hermosísimo pinsapar con profusión de musgos, liqúenes, hongos, heléboros, torviscos, vistosas peonías en primavera y en los claros rosales.
La subida es dura pero corta (1 km escaso). Al final de ésta se llega a un punto (a 2 kms. escasos desde la salida) conocido por “llano de los gamones”, planta muy abundante llamada también “varita de San José”.


Desde los gamones, el camino sube suavemente entre grandes pinsapos hasta el borde del imponente Tajo de la Caína, distante poco más de medio kilómetro. Seguimos el camino y a unos 200 m. hay una gran cueva y poco después una fuente con un pilón.




Desde aquí la vista es magnífica, con la cañada al fondo y el Torrecilla al frente.

Volvemos hacia el tajo y el camino sube al Cerro del Tocón (encima de la fuente) por el borde del pinsapar. Después de 1 km. (desde la fuente) llegamos a una bifurcación de caminos, junto a un gran pinsapo de varios brazos (candelabro) al lado del cual pasa una pista que baja por el pinsapar llevándonos casi hasta el fondo del valle para llegar finalmente, después de unos 3,5 Kms, al punto de salida por el camino alto.


Flora y fauna.
El pinsapo, Abies pinsapo, fue descrito por primera vez por el botánico ginebrino Edmond Boissier en 1838, cuando realizaba estudios sobre la flora malagueña.
Había entablado amistad con los botánicos malagueños Félix Haenseler y Pablo Prolongo que le mostraron sus herbarios (en los cuales estaba el pinsapo) y le ayudaron en sus investigaciones

El pinsapo es, como hemos dicho, un abeto endémico de la Serranía de Ronda (Sierra de las Nieves, Sierra Bermeja, Sierra de Grazalema, etc.), de porte cónico, que puede alcanzar hasta 30 m., con hojas aciculares de unos 10 mm, dispuestas en las ramas radialmente y dando a éstas forma tubular.

Las piñas (flores) masculinas son de color rojizo y se disponen en las ramas bajas, siendo su tamaño 8-10 mm.


Las piñas (flores) femeninas son de unos 12 cm., color marrón claro (primero verdoso) y situadas en la parte alta del árbol, como en todos los abetos del mismo género, enhiestas (quizás por eso en algunas zonas las llaman “pichas de fraile”).


Las masculinas sólo pueden observarse en primavera, las femeninas persisten y van perdiendo sus escamas y semillas, pero no caen completas al suelo (como ocurre en el caso de los pinos).

El pinsapo es una reliquia de los bosques de la Era Terciaria con climas más fríos y húmedos, que queda por eso confinado a altitudes superiores a los 1.000 m. y en las laderas que miran al Norte (umbrías). Por “suerte” su madera no tiene mucho valor económico ni para construcción ni carboneo, y digo suerte porque me temo que en caso contrario el número de pinsapos sería exiguo.

El peligro de este pinsapar es por un lado los incendios producidos por malvados y desaprensivos y por otro un hongo que por ahora no ha sido posible combatir eficazmente. Los ejemplares que vemos secos son en su mayoría por su causa.

En la fauna de la Sierra lo más significativo es la cabra montes, muy fácil de observar, por supuesto si no se alborota mucho. Otras especies como el oso, el lobo o el quebrantahuesos han desaparecido. Así la última cita del oso es del año 1604. El último quebrantahuesos fue citado en 1921 y el último lobo en 1940.

En los cantiles del Tajo de la Caína hay una numerosa colonia de chovas piquirrojas. Son córvidos con el pico y las patas rojas.